Antes de tu cita

Haz una lista de preguntas y de temas a tratar. Antes de la cita, haz una lista de preguntas e inquietudes. Colócalas en el orden. Escribe todo para sacar todo el provecho posible a tu consulta. Por ejemplo, ¿Tienes nuevos síntomas? ¿Necesitas una vacuna contra la COVID o la influenza? ¿Necesitas un nuevo surtido de alguna receta? Tus preguntas no necesitan ser complejas. Lleva la lista a tu cita.

Ven preparado con una lista de tus medicamentos. Haz una lista de los medicamentos que tomas. Anota las dosis de cada medicamento y los horarios en que los tomas. Recuerda también incluir las vitaminas y suplementos.

No olvides otros detalles importantes. Lleva tu tarjeta de seguro y los nombres de otros proveedores que te atienden. También lleva los registros médicos, resultados de las pruebas o radiografías que estén relacionadas con tu consulta. Tu proveedor puede querer verlos para tener una mejor imagen de tu salud. Posiblemente también quieras averiguar si un amigo o familiar puede ir contigo para escuchar, tomar notas y hacer preguntas.

Durante tu consulta

Toma notas. Anota cuando el proveedor responda tus preguntas, de esta manera podrás recordar lo que dijo. Asegúrate de preguntar si no entiendes algo. Si no entiendes una palabra médica o una instrucción, pregunta su significado. Recuerda pedir un intérprete, si es necesario. Para obtener consejos acerca de cómo entender muchas palabras médicas, haz clic aquí. También puedes encontrar cómo pronunciar muchos términos médicos aquí.

Asegúrate de entender lo que se dijo y cuál es el plan. Si tu proveedor te está recetando un medicamento nuevo, te está ordenando una prueba o te está enviando con un especialista, asegúrate de preguntar la razón, lo que involucra, qué explicará o qué decisión ayudará a tomar el resultado de la prueba y qué esperar cuando se tengan los resultados.

Pide la información por escrito. Es importante que tu proveedor te de las instrucciones del diagnóstico y el plan de tratamiento por escrito. Muchos proveedores también usan registros electrónicos para rastrear un informe de salud del paciente. Pregunta si tus informes están disponibles de forma electrónica y cómo puedes acceder a ellos. Esto puede ayudar a rastrear el resultado de la prueba, citas posteriores, diagnósticos y medicamentos.

Toma decisiones con tu proveedor. Para recibir la mejor atención, tú y tu proveedor de atención médica deben tomar decisiones juntos. A este proceso se le llama “toma de decisiones compartida.” Tu proveedor comparte la experiencia médica y tú lo que quieres como resultado de tu atención. Luego, juntos toman la mejor decisión.

La toma de decisiones compartida es útil cuándo existe más de una manera para tratar tu problema de salud. Tu proveedor puede darte un "auxiliar para la toma de decisiones", que frecuentemente es un folleto o una herramienta que explica las diferentes opciones, riesgos y beneficios. Los auxiliares para la toma de decisiones también te ayudan a pensar en tus opciones y prioridades. Luego, tú y tu proveedor pueden conversar acerca de tus opciones y tus preguntas.

Pregunta acerca de los costos de los diferentes tratamientos u opciones. Para ayudarte a planear los costos de tu atención médica, es importante preguntar los costos de las diferentes opciones de tratamiento. La herramienta de búsqueda de costos de FAIR Health puede ayudarte a estimar los honorarios del proveedor, gastos en pruebas de laboratorio y mucho más.